LA FÁBRICA DE CASTORÍN

Fueron de las primeras bebidas refrescantes que se empezaron a fabricar en España. Sus burbujas suponían una auténtica novedad en la época y fueron los líderes del mercado durante varias décadas.

Tras el paso de los años, tanto la gaseosa como el sifón convive con una gran variedad de bebidas refrescantes y ha encontrado nuevas fórmulas para adaptarse a distintas necesidades y formas de consumo actuales.

Existe constancia de que hace 175 años comenzaron a fabricarse los primeros sifones en España. Se trataba de unos de los refrescos pioneros en nuestro país. Nació en las farmacias y se utilizaba para tratar pequeñas afecciones como dolencias estomacales.

El sifón está compuesto principalmente de agua carbonatada. Sus características burbujas suponían una nueva forma de saborear una bebida. Así, gracias a su sabor, se fueron popularizando y pasó a formar parte de los hábitos alimentarios de la población.

LA FÁBRICA DE CASTORIN

Recuerdo bien la época de Javier, Jaime, Antidio, Mari Carmen... Eran algunos de los jóvenes que trabajaban en la fábrica de gaseosas.

¿ Qué fabricaban?

Sifón, gaseosa, naranjada, limonada...

El sifón era agua y anhídrido carbónico. Para las gaseosas se utilizaban agua con extractos y esencias. (Como decía nuestro amigo Chispas que también trabajo en la fábrica, casi todo era agua).

El carro de Castorín era de los más grandes del pueblo, cuantas veces nos llevaba Javier y otros mocetes a un montón de enanos corriendo por las calles e intentando pillar a los transeúntes.

Aquel carro podía llevar como unas diez cajas con diez botellas cada una, unas cien botellas en total entre sifones y gaseosas. Y también a una docena de niños de la época.

No estaba destinado a ser una bebida refrescante tal y como la conocemos en la actualidad, pues entonces nunca se servía frío ni en verano, de por si no existían los frigoríficos. A partir de los años 70 sí se consideraba ya un refresco,tinto de verano.

Habitualmente se hacían combinaciones con el sifón o gaseosa Jaén: dame un vino envuelto se decía , también con el “Martini o Cinzano". El sifón era lo más común para el vermut. El casco o botella siempre se devolvía.

La fábrica siempre estaba abierta, daba igual nos mandaran a por sifones a las 2 de la tarde que las 11 de la noche, despachaban igual no había horario.

Recuerdo ver a los chicos que comente anteriormente como trabajaban en la fábrica, ellos podían tener 14 años y yo 9, cuando se devolvían los cascos en la pila del corral de Castorin, botella a botella había que abrirla, limpiarla con lejía, enjuagarla bien, dejarla secar boca abajo y rellenarla una a una, siendo todo ello un proceso enteramente manual.

Con los años, marcas multinacionales aparecieron con productos similares pero sus costes eran más bajos...invadieron el mercado y acabaron con estas pequeñas empresas familiares, las cuales tenían un alcance más local, de hecho el caso de Castorín marcho a Salamanca con la gaseosa revoltosa.

Cuando teníamos la Casera y la Revoltosa eran las gaseosas más famosas de los años 70...

Había un dicho de la época que decía ¿en que se parecen las mujeres a la gaseosa?

Unas son caseras y las otras revoltosas.

Las botellas que se rompían en la fábrica que eran muchas los cristales se cargaban en las alforjas de la burra y se tiraban en el arroyó grande, aquello era una parva de cristal los chiquillos íbamos a buscar las bolas de las gaseosas eran un tesoro, pues eran las mejores para jugar al gua, las canicas.

Tampoco había agua corriente en las casas y el mismo burro estaba todo el día trayendo agua del pilón para la fábrica de gaseosas.